Maldito Estómago se ha marcado un objetivo plausible: comer en los mejores japoneses de Barcelona para contárselo a sus lectores y que les aproveche. En ello andaba cuando llegó a Daruma, un restaurante en pleno Eixample que se llama igual que el amuleto japonés de los propósitos, un muñeco de forma ovalada y papel maché que infunde fuerzas para conseguir todo lo que persigamos. No eran los trabajos de Hércules, de acuerdo, pero Daruma cumplió con una espléndida cena en el restaurante que lleva su nombre.

Al frente de la cocina está Takenori Mito, que antes de abrir Daruma a mediados de 2013 se fogueó en el restaurante Yashima, un clásico de la ciudad fundado en 1989. Como en aquel, la estrella de Daruma es el teppanyaki o plancha japonesa: si te sientas frente a ella saborearás manjares como solomillo, vieiras o gambas y además disfrutarás del espectáculo de Takenori Mito cocinándolos ante tus ojos. En la zona teppanyaki puedes pedir a la carta o un menú degustación de 57 euros, bebida aparte. Al tratarse de un final de semana que parecía de mes decidimos dejarlo para otro día y nos acomodamos en una mesa donde el precio se modera y la carta se amplía a otras especialidades japonesas y un amplio surtido de sushi.

Nos decantamos por el butterfish o pez mantequilla, cocinado con un golpe de plancha y coronado por huevas que dan el toque salado a esta delicia de pescado, de textura grasa y sabor delicado con un punto dulce. Si no lo has probado antes, imprescindible. Seguimos con el maki de foie, sin mayor misterio que el de respetar un producto de lujo, apenas marcado al fuego para no estropear su untuosidad.

A continuación nos dimos un festín de sushi con el moriawase especial, que incluye nueve nigiri y ocho hosomaki, con piezas de calamar, vieira, anguila y rodaballo, además de las tradicionales de salmón y atún. Completamos este apartado con un maky spicy tuna –rollos invertidos de atún picante con aguacate– correcto pero para mi gusto lo más sustituible.

La ternera puso el broche final con el yakiniku, literalmente carne a la parrilla, aderezada con salsa barbacoa japonesa. En su punto y de lo más sabrosa. A estas alturas hacía tiempo que nos habíamos saltado la recomendación de dejar un hueco para los postres así que prescindimos de ellos, que de todas formas nunca han sido lo fundamental en un restaurante japonés.

En total 73 euros para dos, con vino incluido. Y la sensación de que habrá que repetir porque la carta del Daruma tiene las mismas dimensiones del local, es decir enormes. Basta echarle un vistazo para comprobar que no se deja un palo de la gastronomía japonesa sin tocar: también ofrece suyikayi o cocido japonés, así como tempura, ramen, varios tipos de fideos y arroces. Recelo de este tipo de locales y más si son japoneses, donde por lo general se apuesta por la especialización y los espacios reducidos, pero todo lo que probamos en Daruma fue intachable. Para ganarse un lugar de honor en el ránquing de Maldito Estómago no ha necesitado amuleto alguno.

Restaurante Daruma

Calle Villarroel, 237

08036 Barcelona

Teléfono:936 67 20 03

P.D Aún estáis a tiempo de disfrutar de la Japan Restaurant Week: más de 60 restaurantes japones en Barcelona y Madrid con menús de 15 y 25 € hasta el 17 de  abril. Daruma está entre ellos, aunque Maldito Estómago cenó en él antes

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